5 de octubre de 2005

Vida en cada sorbo de café

Combinación perfecta entre el sabor, cuerpo, aroma y acidez

Así lo producen indígenas, sin deteriorar la tierra

Isabel Zavala De la Rosa

Los antepasados tsotsiles son dueños de la tierra chiapaneca, con idioma, cultura, calendario y forma de gobernar propios.

Maya Vinic es una sociedad cooperativa de pequeños productores de café de los municipios de “San Pedro Chenalhó”, Pantelhó y Chalchihuitán, en “Los Altos” de Chiapas, organizados para trabajar comunitariamente, motivados e inspirados por la sabiduría de sus antepasados.
Maya Vinic que significa “El Hombre Maya Tsotsil”, es una joven y dinámica empresa indígena, con base organizacional sólida y participativa, que se encuentra en proceso de desarrollo y fortalecimiento. Está orientada al comercio justo y sin intermediarios, con una filosofía de servicio y satisfacción al cliente, por lo que es reconocida a nivel nacional e internacional.
La cooperativa fue creada dentro de la sociedad civil denominada “Las Abejas” en 1999. Al observarse el panorama de abuso en los bajos precios de compra del café por parte de coyotes e intermediarios y ante la grave situación económica por la que atraviesan estas comunidades, se fundó Maya Vinic con el propósito de mejorar las condiciones de producción y comercialización de sus productos agrícolas, de manera que se fortalezca la autonomía de dichas comunidades.
Los caficultores se vieron en la necesidad de ofrecer un café de buena calidad, para que el consumidor pague un precio justo por un café cosechado con dignidad por un campesino que desea recibir los frutos de su propio esfuerzo.
Esta cooperativa es una respuesta organizada para mejorar su situación económica, encontrando precios justos para su trabajo; con el ideal de que la organización es una forma más de lucha y resistencia en contra de la miseria en que se encuentran estas comunidades indígenas. La organización no sólo representa beneficio económico sino también dignidad y un trato justo.
Conformada por 676 socios de 36 comunidades indígenas, Maya Vinic trabaja de manera orgánica, haciendo producir la tierra sin deteriorarla.
Es así que esta empresa produce, comercializa y exporta café verde oro y café tostado, en bolsas metalizadas adecuadas para garantizar el sabor y el aroma del producto.
La altura de los cafetales es superior a los mil 200 metros sobre el nivel del mar, por lo que técnicamente, este café orgánico es denominado de “estricta altura”, lo que significa que las tierras en donde se produce tienen la altitud adecuada para desarrollar semillas de excelente calidad.
El tipo de grano producido es árabe o arábico, modalidad de café que se caracteriza por tener abundante cuerpo y un aroma afrutado. Además está complementado con las variedades “caturra” y “mundo novo”.
La técnica de producción es orgánica, por lo que no se emplean agroquímicos durante el proceso. Utilizando así, compostas, fertilización orgánica, barreras vivas y muertas, etc.
Cabe señalar que a partir de la cosecha 2001-2002, Maya Vinic se encuentra registrado como productor orgánico de café por la Certificadora Mexicana de Productos y Procesos Ecológicos, S. C. (CERTIMEX).
En 2001 recibió el Premio de Derechos Humanos, Francia 2001, por la lucha contra el racismo y la explotación. Además, desde septiembre de 2002, Maya Vinic mantiene el sello alemán de Comercio Justo Internacional FLO-I, el cual certifica que la organización trabaja y se administra con criterios de justicia social y eficacia empresarial.

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