Belleza, color y sabor

Carambola, una estrella que conquista

30 años cultivando excelencia

Isabel Zavala de la Rosa

En opinión de Frank Magdalh Reiche, lo más importante son los agricultores, pues éstos son la base para la economía agrícola de un país. “La agricultura es primero, la tierra no se explota, se cultiva, ésta es muy importante, pero para cultivarla se necesitan agricultores”.
Por ello, desde 1952 la tierras en donde se encuentran asentados los Viveros Yautepec han producido belleza, color y sabor, pues esta empresa cultiva diversas frutas y plantas.
“Es injusto que importemos alimentos, cuando México tiene una gran cantidad de microclimas, y todos esos productos se pueden producir en el país, ésta debería ser una nación exportadora”, subrayó Magdalh Reichel, presidente y fundador de Viveros Yautepec.
Dichos viveros se encuentran ubicados a escasos 30 kilómetros de la ciudad de Cuernavaca, yendo por la vía Cuernavaca-Cuautla, precisamente en el municipio de Yautepec, estado de Morelos. Cuentan con aproximadamente 14 hectáreas de terreno en un clima inmejorable, a mil 150 metros sobre el nivel del mar. Orientados principalmente a multiplicar árboles frutales para crear plantaciones comerciales, además tienen una colección de más de mil 400 árboles frutales de alto registro en producción. Sin embargo, su principal cultivo es la carambola.
Frank Magdalh, comentó que desde hace aproximadamente 30 años comenzaron a cultivar carambola, atractivo árbol de 10 metros de altura que produce frutas carnosas de cinco ángulos.
De igual forma, explicó que existen muchas variedades de carambola, “algunas que son más dulces, y otras que por su consistencia son especiales para ser transportadas a largas distancias, mismas que tienen una vida de anaquel más larga”, precisó.
Las Carambolas Yau poseen una calidad inmejorable, por lo que son exportadas a Canadá, Japón y Europa, en donde son apreciadas por su lujosa apariencia de estrella si se corta transversalmente, de ahí su nombre en inglés Starfruit, y por las múltiples formas que existen para degustarla.
Debido a que anualmente cosechan aproximadamente 800 toneladas de carambola, personal especializado selecciona y empaca la fruta, según los requerimientos de los compradores. Es importante considerar que para su consumo inmediato, las carambolas se deben preferir cuando presentan un color amarillo, pues resultan más sabrosas y dulces. Tratándose de un fruto muy delicado, debe llegar al consumidor sin maltratos.
Originaria de Malasia, la carambola tiene un alto contenido de vitaminas y minerales, por lo que se ha convertido en favorita en la dieta diaria de la población del lejano oriente, donde es fácil encontrarla en todos los mercados y puestos de fruta, pero ante todo en arreglos frutales de hoteles y restaurantes.
En México se degusta al natural como una manzana, en cualquier ensalada y en las pizzas es deliciosa; así como en pico de gallo, sustituyendo al jitomate, decorando el pescado a la plancha, rellenando el pollo al horno y cocteles decorados con rebanada de carambola en vez de limón o naranja. De igual forma, se pueden realizar gelatinas, paletas, nieves y tartas de carambola. Otras deliciosas presentaciones son jaleas y mermeladas.
Por su parte, Francisco Ulloa Román, jefe de producción de los viveros, aseguró que actualmente esta empresa produce carambola a base de soluciones orgánicas, evitando pesticidas e insecticidas, utilizando productos naturales. “Aplicamos controles de plaga naturales y muestreos, que nos ayudan a ofrecer frutas sanas, lo que nos permite comercializarlas eficazmente en el extranjero”, indicó.
Finalmente, apuntó que en el vivero se comercializa carambola verde, alimonada y madura. Es así que la carambola verde se cosecha en ese término para que tenga más vida de anaquel, mientras que la alimonada es utilizada para decorar.