1 de agosto de 2005

Se podría propiciar una “brecha genética”

Necesarias evaluaciones de inocuidad en alimentos GM

Piden incluir consideraciones de orden social, cultural y ético

Isabel Zavala De la Rosa

Según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los alimentos genéticamente modificados (GM) pueden contribuir a mejorar la salud y el desarrollo del ser humano; sin embargo, dicho informe subraya la necesidad de continuar sometiendo a los GM a evaluaciones de inocuidad antes de permitir su comercialización, de modo que se puedan prevenir riesgos.
De acuerdo con la OMS, estos alimentos pueden aumentar la producción agrícola, la calidad alimentaria y la diversidad de cultivos en zonas determinadas, a su vez podrían propiciar una mejora en salud y nutrición, lo que contribuiría a alcanzar un nivel de vida más elevado.
Al describir beneficios y riesgos potenciales asociados a los alimentos GM, el informe titulado Biotecnología moderna de los alimentos, salud y desarrollo humano, señala que algunos genes utilizados en este tipo de cultivos, nunca antes han estado presentes en la cadena alimentaria, por lo que se teme que causen cambios en la estructura genética actual de los cultivos. De esta forma, se expuso la necesidad de evaluar sistemáticamente las repercusiones potenciales de dichos alimentos; recalcando así la importancia de detectar anticipadamente cualquier posible efecto perjudicial para la vida humana.
En la actualidad, las evaluaciones se centran principalmente en las ramificaciones agronómicas y los posibles efectos en la salud, y hasta la fecha no se tiene conocimiento de efectos sanitarios negativos causados por el consumo de alimentos GM. El informe destaca que en los casos en que este tipo de productos se comercializan, los alimentos son examinados con mayor rigor; no obstante, la OMS recomienda se amplíe el alcance de las evaluaciones para incluir consideraciones de orden social, cultural y ético, con el objetivo de evitar se produzca una “brecha genética” entre los grupos de países que permiten el desarrollo, cultivo y comercialización de estos productos y los que no.
Por lo anterior, la OMS está trabajando con la Organización de la Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, con la finalidad de ayudar a diversos países a examinar la introducción de determinados alimentos GM desde todos los ángulos, para encontrar el modo de controlar y explotar la introducción de estos productos en beneficio de sus propias poblaciones.
Cabe recordar que el primer alimento GM, se introdujo al mercado a mediados de los años noventa. Desde entonces, se han comercializado en varios lugares variedades GM de maíz, soja, colza y algodón, que son objeto de intercambios comerciales nacionales e internacionales. En algunos países, se han comercializado además variedades GM de papaya, papa, arroz, calabaza, remolacha y tomate. La producción de cultivos GM ha aumentado notablemente durante el último decenio; se estima que esa producción, aunque concentrada en un número relativamente reducido de países, ocupaba a finales de 2004 cerca del cuatro por ciento de la superficie total de tierras cultivables del planeta.

No hay comentarios.: