Posible solución

Urgen al gobierno autorización para la siembra de maíz GM

Isabel Zavala De la Rosa

Carlos Camacho Gaos, presidente de AgroBio, aseguró que es necesario liberar los permisos para cultivar maíz genéticamente modificado (GM), con el objetivo de terminar con la escasez del grano.
Manifestó que es urgente iniciar estos cultivos, para que en 2008 ya se tengan pruebas piloto y posteriormente se realicen los cultivos comerciales.
Refirió que la semilla tiene un mayor costo de 15 a 20 por ciento, pero explicó se compensa con una reducción de aproximadamente 80 por ciento en incentivos para contrarrestrar plagas y un aumento en la producción de alrededor de 25 por ciento.
En conferencia de prensa, representantes del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), la Confederación Nacional de Granos y Oleaginosas (CONAGO), AgroBIO México, la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) y el Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo A. C. (CONMEXICO), manifestaron que es indispensable elevar la productividad del campo mexicano para poder resolver la problemática del incremento a los precios de otros productos básicos.
En la reunión de dio a conocer que tanto las semillas híbridas como las semillas genéticamente modificadas, han contribuido a aumentar los rendimientos por hectárea en distintas partes del mundo en países desarrollados y subdesarrollados. El incremento en los rendimientos estimados a nivel global por el uso de maíz GM es de alrededor del 15 por ciento; mientras México tiene uno de los rendimientos de producción de maíz convencional más bajos del mundo, con un promedio de 2.9 toneladas por hectárea.
En nuestro país la producción de maíz es de 20 millones de toneladas, lo que representa un déficit de aproximadamente ocho millones de toneladas, precisó Eugenio Carreón, director de Asuntos Regulatorios de la ANTAD.
Los representantes de la cadena de valor agroindustrial y comercial del maíz reconocieron el potencial del uso de la biotecnología agrícola para enfrentar el problema de falta de competitividad y productividad del sector ante la globalización de la economía, con el objetivo de avanzar hacia una mayor seguridad alimentaria de la población.
Asimismo, mencionaron que para impulsar una actividad agropecuaria productiva y sustentable, el campo mexicano debe enfrentar un doble reto: incrementar significativamente la productividad por hectárea de los cultivos y hacerlo de tal manera que resulte compatible con la preservación del medio ambiente.
Por su parte, Jaime Yesaki Cavazos, presidente del CNA, reconoció que el problema de fondo sigue siendo que México necesita producir más maíz para garantizar su abasto. Subrayó que utilizar biotecnología es totalmente necesario.
Concluyó que actualmente se importan nueve millones de toneladas de granos forrajeros, entre ellas siete millones de toneladas de maíz amarillo destinado al sector pecuario y que el 90 por ciento de las importaciones de maíz por parte de los países latinoamericanos provienen de Estados Unidos, siendo la producción de maíz genéticamente modificado mayor a dos terceras partes en este último país, con un costo de producción significativamente menor al nuestro y una mayor productividad.